El inicio del pontificado se vive en España «con gran expectación, con gran esperanza» y sorpresa.
Son palabras a Radio Vaticano del cardenal arzobispo de Madrid, tras su audiencia del pasado viernes con el Papa. La Iglesia en España se siente especialmente interpelada por el mensaje de Francisco sobre «la necesidad de convertirse personalmente, convertirse pastoralmente, convertirse misioneramente.
Esperemos y recemos para que ese fruto se dé», dijo el cardenal Rouco, que había solicitado este encuentro con el Pontífice, aprovechando su viaje a Roma para participar en el encuentro del Santo Padre con el Camino Neocatecumenal. Muchas de las familias enviadas por el Papa el sábado en misión ad gentes habían sido bendecidas en la Misa de las Familias del pasado 28 de diciembre en la Plaza de Colón, «una Misa inolvidable», en la que se vivió un «ese testimonio del evangelio y de la familia con esa nota misionera que impresionó muchísimo» a los madrileños, recordó el arzobispo.
Fue una larga audiencia, de 45 minutos. En la primera parte, acompañó al cardenal el Rector de la Universidad de Estudios Eclesiásticos San Dámaso (UESD), D. Javier Prades. Ambos hicieron entrega al Santo Padre de la Medalla de Honor de la Universidad, y un informe sobre la evolución histórica y la situación actual de la UESD. Le entregaron asimismo algunas publicaciones recientes, especialmente orientadas al campo de la evangelización y la catequesis y sobre la familia.
El Santo Padre bendijo a la comunidad universitaria de San Dámaso y animó a proseguir con este trabajo en favor de la vida de la Iglesia en España, mostrando su confianza en que con el tiempo se podrán ir recogiendo muchos frutos de orden académico y eclesial.